Bricoladores y decoradores

A la hora de hacer cambios en una cocina, ya sea a causa de una reforma integral de la vivienda o porque se quieren modernizar los electrodomésticos, es normal que surjan dudas sobre la instalación eléctrica. Una de las más comunes es la de si puede usarse el mismo enchufe para vitrocerámica y horno. Aunque a algunos les suene extraño, o piensen que puede dar lugar a sobrecalentamientos que impidan el correcto funcionamiento del suministro eléctrico, lo cierto es que es una operación que puede hacerse sin riesgo alguno. Solo hay que saber qué medidas tomar para realizar la instalación siguiendo algunas pequeñas pautas que te vamos a ofrecer a continuación.

Si tu sistema actual de audio y video no está demasiado desarrollado quizás pienses: “¿y por qué debería cambiar lo que ya tengo? ¿qué puntos positivos ganaría mi hogar si decidiera digitalizarla?”. Para resolver éstas y otras preguntas hemos preparado un decálogo sobre las ventajas de la conectividad de elementos multimedia: prepárate porque después de leerlo querrás empezar a planificar tu nuevo hogar multimedia.

Quien se preocupa por la sostenibilidad de su vivienda, normalmente lo hace llevado por un sentimiento de responsabilidad hacia su entorno, y una conciencia ecológica y medioambiental que trasciende los límites del hogar. Por supuesto, la vivienda es uno de los ejes centrales alrededor de los cuales orbitan nuestras vidas, por lo que es comprensible que estas preocupaciones se materialicen en el hogar de un modo destacado.

La eficiencia energética es un asunto estrechamente relacionado con el confort y la comodidad, especialmente en lo que se refiere a la calefacción y la climatización del hogar. Pero para disfrutar de un entorno adecuadamente climatizado, antes es preciso sentar las bases que permitan maximizar la eficiencia energética de la vivienda, aludiendo principalmente a las posibilidades de protección térmica y revestimientos ecológicos que tenemos al alcance, así como a los distintos modos posibles de reducir el consumo energético de la vivienda optimizando los recursos disponibles.

Sin duda, una vivienda máximamente sostenible es aquella que disfruta del grado más alto de autosuficiencia posible, es decir, que se halla equipada con lo necesario para mantener su autonomía respecto a fuentes de energía y suministros procedentes del exterior. Claro está que no abundan las casas sostenibles y 100% autosuficientes, pero imponerse la autosuficiencia como meta permitirá alcanzar el mayor grado posible de la misma pese a las limitaciones que presente el terreno y/o la construcción.

Construir una vivienda sostenible y autosuficiente desde cero, aunque pueda parecer algo alejado de las posibilidades de la mayoría de nosotros, es una opción cada vez más asequible e incluso rentable, especialmente a medio y largo plazo. Además, contar con la posibilidad de elegir el terreno en el que construir, y participar en el diseño y la confección de los planos de la vivienda permite ajustar su construcción a criterios ecológicos y bioclimáticos, se trate tanto de una vivienda prefabricada o de construcción tradicional. Veámoslo paso a paso y con detalle, centrándonos ahora en la elección del terreno y en cuestiones arquitectónicas básicas para disfrutar de una vivienda sostenible.

Para disfrutar de una vivienda sostenible desde el punto de vista medioambiental, o al menos para optimizar los recursos que consumimos y reducir el impacto de nuestras acciones cotidianas sobre el medio ambiente, podemos tomar una larga serie de medidas, la mayoría de ellas muy sencillas y al alcance de cualquiera, con importantes repercusiones en nuestro entorno.

Desde los años 70 y 80 del pasado siglo, la protección medioambiental ha ido ganando progresivamente terreno e importancia entre las preocupaciones de la ciudadanía hasta situarse, hoy, como una de las cuestiones principales y más urgentes que deben afrontar organismos internacionales, gobiernos e instituciones, públicas y privadas, de casi cualquier lugar y condición.