¿Qué es un interruptor?
Un interruptor es un dispositivo eléctrico que nos permite realizar una función de on/off desde un mando. Su funcionamiento consiste en dejar pasar o no la corriente en un circuito eléctrico. Por ello, su función principal es el encendido y apagado de una luz.
Mecánicamente un interruptor consta de dos contactos metálicos separados y una parte móvil actuante que suele ser un balancín. Presionando la tecla movemos el balancín y abrimos o cerramos el circuito/luz.
A nivel de cableado un interruptor tiene una entrada de línea de fase y una salida que se conecta al punto de luz.
Centrándonos en la instalación es primordial saber que el interruptor solo actúa desde un punto. Por ello, en el caso de que queramos controlar desde más puntos una misma lámpara utilizaremos conmutadores o bien cruzamientos. El número de lámparas conectadas en paralelo no influye, siempre miramos los puntos desde los que queremos controlar.
A modo de ejemplo, un interruptor puede ser utilizado para actuar sobre una lámpara de techo en una sala pequeña desde un solo punto. También los encontramos en cocinas, baños o habitaciones pequeñas donde podemos encender y apagar la iluminación desde un solo punto.