Las sillas son elementos del hogar que se usan a diario y que terminan por acusar el paso del tiempo. Si queremos renovar el aspecto de una casa, no debemos olvidarnos de ellas. En los últimos tiempo se han puesto de moda las que se inspiran en estilos de decoración ‘vintage’ o ‘retro’, pero conviven muchos estilos distintos que incluso pueden combinarse entre ellos hasta dar con aquello que se está buscando. A continuación vamos a ofrecerte algunos consejos básicos que te resultarán útiles para restaurar sillas de madera, una tarea sencilla y que dará una imagen completamente renovada a tu domicilio.

¿Sabes lo que vas a necesitar?

Prepara los materiales imprescindibles para realizar la labor de renovación de las sillas. Lo imprescindible será un decapante para madera, una espátula, una lija, una brocha, protector de pintura, esmalte acrílico, un retal de tela con las medidas del asiento, una esponja metálica, unos alicates, una grapadora de tipo tapicero, lápiz y un metro de carpintero.

¿Qué pasos debo seguir?

Estos sencillos pasos te ayudarán a restaurar sillas de madera tapizadas en tela con suma facilidad:

• Retirado de la pintura. En primer lugar, se aplica a la silla el decapante y se espera a que actúe el tiempo indicado por el fabricante. Con cuidado, con la espátula se procede a retirar la pintura, para después lijar la estructura de la silla. De esta forma se logra eliminar restos de barnices, pinturas anteriores o desperfectos ocasionados por el desgaste.
• Pintura de la silla. Una vez que la superficie esté completamente lijada, es el momento de pintar la silla con la brocha, tomando la precaución de dirigir la brocha en todo momento hacia la misma dirección. A continuación ya se puede quitar tanto el asiento como las grapas o el sistema de fijado que presente el tapizado.
• Realización del patrón. Midiendo el asiento sabemos las medidas que debe tener el patrón. Primero pasamos esas medidas al papel y después cortamos la tela según el patrón. Es conveniente dejar unos centímetros de margen.
• Ajuste de la tela y colocación del asiento. Aproximamos la tela al asiento y la grapamos, de manera que se ajuste por completo al asiento. También se debe tapizar la parte inferior del asiento. Los bordes grapados se pueden tapar con un trozo de tela. Por último, se coloca el asiento en su lugar.

¿Qué color es el más apropiado?

A la hora de apostar por un tipo de decoración o por otra, hay que recordar que una silla de madera permite muchas variaciones de telas y colores. Desde las líneas más simples hasta las más barrocas, existen muchos estilos que dan un aire distinto a cada estancia. En primer lugar hay que valorar en qué lugar de la casa va a estar la silla; por ejemplo en una cocina es interesante apostar por telas lisas y colores hasta cierto punto oscuros debido a que ocultan mejor la suciedad, aunque, por otra parte, pueden llevarnos a perder luminosidad. Por ello lo mejor es decantarse por tonalidades intermedias.

En un salón grande, a la hora escoger color para la tela de nuestras sillas de madera entra en juego la combinación con los colores de las paredes, el techo y los suelos, así como alfombras y el resto de los muebles. Aquí, al igual que en las habitaciones, son bienvenidos los estampados y las telas a cuadros.