Electrodomésticos inteligentes: 4 buenas razones para apostar por ellos
La tecnología basada en el internet de las cosas (IoT) hace tiempo que ha centrado sus esfuerzos en hacer más sencillo y cómo el día a día. Los electrodomésticos inteligentes son el mayor ejemplo de cómo la conectividad puede convertir tareas que antes eran rutinarias y complejas, en funciones que se hacen por sí mismas y que solo requieren de una pequeña programación. Precisamente son los hogares donde los fabricantes han volcado sus esfuerzos y donde con más claridad puede verse la enorme diferencia de prestaciones que hay entre los electrodomésticos tradicionales y los de nueva generación. Aún así, si aún tienes dudas sobre si apostar por estas nuevas tecnologías, te ofrecemos 4 razones para elegir electrodomésticos inteligentes que estamos seguros de que van a convencerte.
Ahorran tiempo y dinero
Sí, esta razón en realidad es doble. Mantener a raya el gasto que cada mes hacemos en la factura de la luz es suficiente argumento para que muchos decidan adquirir una lavadora inteligente o un frigorífico conectado a Internet, pero también ahorrar tiempo es una razón de peso. Por una parte, los electrodomésticos inteligentes permiten programar su activación, de tal manera que podremos escoger, por ejemplo, que el lavavajillas se active durante la noche, ya que la tarifa de la luz es más económica durante esa franja de tiempo. La eficiencia energética, por lo tanto, será máxima. Pero es que, además, este tipo de dispositivos son capaces por sí mismos de elegir la franja en la que su funcionamiento es menos costoso. A lo que hay que sumar que muchos ofrecen mediciones de periodos de tiempo, como días, semanas o meses.
Permiten el control remoto
Los electrodomésticos inteligentes sacan el mayor partido a su conectividad con todo tipo de teléfonos móviles inteligentes y tabletas. Esto significa que, por ejemplo, si contamos con un sistema de calefacción inteligente, podemos activarla cuando falten unas horas para que regresemos a casa de nuestras vacaciones. Nuestro smartphone se convierte, de esta forma, en una central de funcionamiento desde la que podemos usar numerosas funciones del aparato sin necesidad de estar presentes.
Informan de las averías
El contratiempo de ir a activar un electrodoméstico y que este se encuentre averiado puede resultar realmente perjudicial con el ritmo de vida que llevamos hoy en día. Los electrodomésticos inteligentes son capaces de avisarnos de que se ha generado una incidencia en cuanto ésta se produce. No solo eso, sino que además son capaces de reportar la incidencia al fabricante y de avisar al servicio técnico si la avería lo requiere. En el caso de pequeñas incidencias, algunos modelos llegan a arreglarse por sí mismos. Una funcionalidad que incluyen muchos de estos dispositivos es la de avisar de las revisiones programadas que deben superar, de forma que se evite la aparición de fallos de funcionamiento derivados del desgaste.
Mejorarán tu salud
Uno de los campos en los que más están avanzando los electrodomésticos inteligentes es en el de la salud. No se trata de que, por ejemplo, puedas cocinar de forma más saludable, sino que ya existen microondas y hornos capaces de realizar un análisis nutricional de la comida que estás preparando. Existen sanitarios capaces de analizar tu orina y detectar en ellos signos de algunas patologías, pero también colchones que cambian su dureza en función de tu peso y hábitos de sueño (horas que pasas dormido, postura, etc.) o dispositivos de iluminación que adaptan su intensidad a la luz que penetra desde el exterior en las diferentes estaciones del año.
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