Descubre cómo camuflar cables con 6 trucos infalibles
Si algo tienen en común tanto las viviendas antiguas como las nuevas, es la abundante presencia de electrodomésticos y todos tipo de dispositivos eléctricos que se usan a diario. Esto significa que, queramos o no, nos encontramos con un gran número de cables por los que todos ellos se conectan a la corriente. Una de las grandes preguntas que surgen cuando esto se convierte en un inconveniente es cómo camuflar los cables de una estancia, en especial cuando se trata de lugares como la cocina, el despacho, el salón o una sala multimedia. Tenerlos recogidos y, a ser posible, ocultos, no solo repercute en una mejor estética, sino que además evita los enganchones y los tropiezos. Descubre a continuación 6 trucos infalibles para decir adiós a los cables sueltos y visibles.
1. Sácale partido a la regletas
Una regleta puede ayudarte mucho si no sabes cómo ocultar los cables de algún punto de tu vivienda. Puedes elegir entre una enorme diversidad de ellas, e incluso encontrarlas con interruptor y regulación horaria programable. Comprueba cuál es la potencia máxima de la regleta y recuerda que para usarlas debes saber cuál es la potencia eléctrica de aquellos dispositivos que conectemos. Además se desaconseja conectar una regleta con otra, porque daría lugar a sobrecargas.
2. Utiliza un recogecables
Un recogecables puede ser una excelente solución si no sabes cómo camuflar cables. Aunque suelen usarse de forma más habitual en despachos y oficinas, también puedes aprovechar sus ventajas en tu domicilio. Suelen estar fabricados en materiales resistentes, flexibles y no conductores de la corriente eléctrica, y existen muchos tipos distintos, desde las ‘espirales’ que convierten muchos cables en uno solo, hasta otros que recogen todos los cables en un círculo. Antes de adquirir uno comprueba cuál es su capacidad.
3. Aprovecha el rodapié
El rodapié, esa banda horizontal que recorre la parte baja de las paredes, puede venir muy bien para recoger algunos cables sobre él. Esta solución está indicada cuando se trata de pocos cables. Recuerda que puede que tengas que dar una mano de pintura a los cables a la vista para que su tonalidad concuerde con la del resto de la pared.
4. Introducir los cables en la pared
Aunque en este caso se requiere de cierta obra y hay que ‘picar’ la pared, el resultado es muy bueno. Bastará con que realices dos orificios en la pared para los cables, uno de entrada y otro de salida, para que evites verlos constantemente. Asegúrate, antes de hacer los agujeros en la pared, que no dañas instalaciones que se encuentren detrás de ella.
5. Compra mobiliario preparado para camuflar cables
Los escritorios cada vez se fabrican teniendo más en cuenta la cantidad de cables que necesitamos debido al uso de ordenadores, flexos de luz y elementos periféricos. Por eso muchos presentan salidas de cables disimuladas por los laterales o por la tabla superior con toques estéticos. Pero no solo se trata de los escritorios; algunos armarios y cómodas también están preparados para ocultar cables. Recuerda que las cortinas pueden también ser útiles para esta función.
6. Si no te queda más remedio… sácales partido
Si te resulta imposible camuflar los cables de tu casa, busca soluciones estéticas que hagan su presencia más llevadera. Si son lo bastante largos puedes utilizar pinzas especiales para conducirlos y simular un atractivo dibujo en la pared. O puedes introducirlos dentro de una tubería para dar un cierto aire retro e industrial a un espacio de la vivienda. A partir de aquí, la imaginación es el límite.
Posts relacionados:
También te recomendamos esta guía que puedes descargar en PDF gratuitamente para conocer los consejos que te proponemos para proteger tu hogar: